ESTADO ESPAÑOL -05/02/2018

 

Del 25 al 28 de enero en Madrid se reunió el III Encuentro de la Red Sindical Internacional de Solidaridad y Luchas (RSISL)…

¿Un paso adelante o una nueva oportunidad perdida
para unir a la clase obrera ante el brutal ataque de los capitalistas?

Refugiados sirios y luchadores solidarios con la revolución siria del Estado Español y Europa en el encuentro de la Red Sindical Internacional, llamando a luchar para frenar la masacre a las masas sirias

Desde que se profundizó la ofensiva imperialista, en medio de la crisis económica mundial, se ha desarrollado tanto en Europa como en el continente americano, Magreb y Medio Oriente, una gran lucha de la clase obrera contra el brutal ataque de los capitalistas que buscan hacerles pagar el costo de la crisis.
En cada uno de esos combates los trabajadores tendieron a unir su pelea con otros trabajadores, por encima de las fronteras. Un gran ejemplo de esto son los estibadores portuarios del Estado Español que unificaron su lucha con los portuarios de Bélgica, Holanda, etc que se negaron a descargar a la empresa imperialista Maersk en solidaridad con los trabajadores de Algeciras y su huelga.
En el continente americano, tanto en Brasil como en Argentina los trabajadores respondieron al ataque de los gobiernos con enormes luchas contra la flexibilización laboral y las reformas antiobreras.
En Francia los trabajadores y la juventud combativa le presentaron batalla al gobierno de Hollande que impuso por decreto la Ley Khomri, que hoy aplica y profundiza Macron. Esto no podría haber sido posible sin la traición de la burocracia sindical que entregó la lucha contra esta Ley y enterró tratando de vándalos a los jóvenes que gritaban “¡Viva la Comuna!”
Durante estos dos últimos años en Siria se ha profundizado el genocidio contra los explotados, que ya supera hoy los más de 600.000 asesinados y 15 millones de desplazados internos y refugiados. Al mismo tiempo los trabajadores hemos perdido Cuba, entregada por los Castro y los Bolivarianos al imperialismo yanqui.

Ante semejante ofensiva de los capitalistas y las enormes respuestas de la clase obrera ¿qué votó el III Encuentro de la Red Sindical Internacional? ¿Votó un plan de lucha para preparar una huelga general mundial como hicimos los trabajadores para conquistar las ocho horas de trabajo? Porque hay que enfrentar la flexibilización laboral en Francia, en Alemania, en Brasil, en Argentina y en decenas de países, de forma unificada.
¿Acaso ante el brutal genocidio en Siria, donde todos los días son asesinados por cientos explotados como los Mártires de Chicago, votaron hacer una jornada internacional de lucha?
Lamentablemente, para los trabajadores del mundo, los representantes sindicales en el Encuentro sólo votaron, como figura en su manifiesto final, “Nuestra solidaridad, más allá de las fronteras, es una de nuestras respuestas.”

 

La primera obligación de los sindicatos de los países imperialistas es luchar contra el enemigo que está en casa

En este III Encuentro de la Red Sindical participaron sindicatos como Solidaires (dirigido por el NPA) de Francia y al mismo tiempo representantes de sindicatos de Costa de Marfil, Botswna o Mali.
No entendemos cómo los representantes de Solidaires no plantearon la moción de lucha por ¡Fuera el imperialismo francés de sus colonias! ¡Fuera las bases militares y las tropas francesas de Mali y toda África!
Tampoco escuchamos a los representantes de sindicatos de Inglaterra luchar porque sea bandera de lucha de la clase obrera inglesa el retiro de las tropas inglesas de las Malvinas Argentinas o de Gibraltar ni contra la multinacional Angloamerican responsable de la masacre de los 34 mineros de Marikana, entre otros.
Se pueden dar varios ejemplos en este sentido, pero lo que se ve a las claras es que los sindicatos de los países imperialistas se niegan a ponerse a la cabeza de la lucha de ¡El enemigo está en casa!
La clase obrera de las potencias imperialistas necesita de direcciones en los sindicatos que enfrenten a Macron, a Trump, a la City de Londres, como lo que son: los más grandes saqueadores y asesinos de los explotados de las colonias y semicolonias, y de su propio proletariado.
Solidaires, dirigido por el NPA francés, guarda un escandaloso silencio cómplice ante la invasión de las tropas de la V República asesina a Mali.

No ha salido ni una sola moción en el último encuentro de la Red, insistimos estando representantes sindicales de Malí y distintos países de África, para organizar una lucha por el retiro de las tropas francesas.
Tampoco han querido votar la moción que propusimos junto a refugiados sirios y organizaciones de trabajadores migrantes de afiliar como miembros honorarios de sus sindicatos a los refugiados sirios y a todos los trabajadores inmigrantes en Europa.
Estas direcciones de sindicatos europeos no han propuesto ni una sola moción contra la brutal masacre y la represión que sus gobiernos imperialistas descargan sobre los trabajadores inmigrantes.
Tan sólo se han limitado a nombrarlos en el manifiesto final, como dando cuenta de que existen, sin que eso implique, según ellos, ninguna obligación al respecto. Por eso han escrito: “La lucha de los inmigrantes en los Estados Unidos, así como en Europa, también alcanzó una importancia tremenda.”

Un sindicato de un país imperialista debe llamar a que el movimiento obrero de su país ataque la propiedad imperialista y lucha junto a sus hermanos de clase del mundo semicolonial para liberarlos de la opresión y del saqueo imperialistas. Recordemos que la política de los sindicatos ingleses de las TUC que pedían “trabajo inglés para los ingleses”, culpando a los inmigrantes y refugiados de la crisis económica, la pagaron luego los obreros españoles, griegos, portugueses e italianos que debieron emigrar a otros países de Europa para conseguir trabajo.
Esta misma política ya la están pagando los trabajadores en Francia a los que les han quitado las 35 horas semanales, también los trabajadores alemanes a los que les quieren imponer la baja del salario.
Es que todo pueblo que no ayude a liberar a sus hermanos oprimidos en las colonias y semicolonias jamás podrá liberarse a sí mismo.

 

¿Distribuir las riquezas o expropiar a los capitalistas?
Una vieja polémica con el FSM…

Mientras la burguesía y las transnacionales le quieren hacer vivir un infierno a los trabajadores con la quita de sus conquistas, el III Encuentro de la RSISL votó que su programa fundamental es: “Queremos construir un sistema fundado en los bienes en común, en la redistribución de las riquezas entre aquellas y aquellos que la crean, es decir los trabajadores y las trabajadoras, fundado en los derechos de los trabajadores y las trabajadoras y en un desarrollo ecológicamente sostenible.”

Los trabajadores ya hemos sufrido esa política de “repartir las riquezas” que desde hace años planteaba el Foro Social Mundial. Con esa política engañaron y traicionaron a los trabajadores para que paguen la crisis de los capitalistas.
Los bolivarianos clamaban hay que “repartir las riquezas”, pidiéndole limosnas a los superbanqueros de Wall Street, aclarándoles que si no repartían algo perderían todo. Intentaban hacerle creer al proletariado mundial que los parásitos explotadores y las transnacionales pueden repartir las superganancias sin que los trabajadores tomen el poder y expropien su propiedad, la propiedad de los medios de producción que parasitan.

Para ello hay que poner en pie instituciones aptos para la guerra de clases como los comités de fábrica y las coordinadoras obreras de lucha. Este es un viejo debate en el movimiento obrero entre revolucionarios y reformistas. Así contraponía Trotsky la política del stalinismo a la de los revolucionarios en los años `30: “Pues sugieren (los stalinistas) la idea de que un cierto mejoramiento, e incluso un mejoramiento importante, puede ser obtenido en los marcos del régimen actual (…) La fórmula política marxista, en realidad, debe ser la siguiente: Explicando todos los días a las masas que el capitalismo burgués en putrefacción no deja lugar, no ya para el mejoramiento de su situación, sino incluso para el mantenimiento del nivel de miseria habitual; planteando abiertamente ante las masas la tarea de la revolución socialista como la tarea inmediata de nuestros días; movilizando a los obreros para la toma del poder; defendiendo a las organizaciones obreras por medio de las milicias, los comunistas (o socialistas) no pierden, al mismo tiempo, ni una sola ocasión de arrancar al enemigo, en el camino, tal o cual concesión parcial o por lo menos impedirle rebajar aún más el nivel de vida de los obreros” (“Una vez mas ¿A dónde va Francia?”, León Trotsky, marzo de 1935).

 

Por direcciones revolucionarias en los sindicatos
Llamado a los obreros internacionalistas que buscan un camino para unir su lucha

El manifiesto del III Encuentro de la Red Sindical, demuestra que con tanto esfuerzo puesto por los trabajadores de los sindicatos de los distintos países que participaron, no se logró el objetivo.
La mayoría de la base de esos sindicatos ansiaba unir su lucha con los trabajadores de los demás países para enfrentar juntos el ataque de los capitalistas.
Los obreros de base que en el último encuentro de CSP-Conlutas levantaron la bandera de la revolución siria, que lucharon por unir su pelea a los trabajadores de Argentina contra la flexibilización laboral, no pueden permitir que tanto esfuerzo sea dilapidado.
Los combatientes obreros franceses que lucharon denodadamente contra la Ley Khomri que el gobierno de Hollande y hoy de Macron, junto a la burocracia de Martínez de la CGT les impusieron, tampoco pueden permitir que la dirección de Solidaires-NPA se ponga a los pies de la burguesía de la V República imperialista francesa.
¡La clase obrera necesita direcciones revolucionarias en los sindicatos para luchar seriamente por sus demandas y las del conjunto de los explotados!
El Programa de Transición, de la IV Internacional, define con claridad: “Los sindicatos, aun los más poderosos, no abarcan más del 20 al 25% de la clase obrera y, por otra parte, sus capas más calificadas y mejor pagadas. La mayoría más oprimida de la clase obrera no es arrastrada a la lucha sino episódicamente en los períodos de auge excepcional del movimiento obrero. En estos momentos es necesario crear organizaciones ad-hoc, que abarquen toda la masa en lucha los comités de huelga, los comités de fábrica, y en fin, los soviets”. (…) “Por todo lo que antecede las secciones de la IV Internacional deben esforzarse constantemente no sólo en renovar el aparato de los sindicatos proponiendo atrevida y resueltamente en los momentos críticos nuevos líderes dispuestos a la lucha en lugar de funcionarios rutinarios y carreristas, sino también de crear en todos los casos en que sea posible, organizaciones de combate ad hoc que respondan mejor a los objetivos de la lucha de masas contra la sociedad burguesa, sin arredrarse, si fuese necesario, frente a una ruptura abierta con el aparato conservador de los sindicatos. Si es criminal volver la espalda a las organizaciones de masas para contentarse con ficciones sectarias, no es menos criminal tolerar pasivamente la subordinación del movimiento revolucionario de las masas al contralor de pandillas burocráticas abiertamente reaccionarias o conservadoras disfrazadas de “progresistas”. El sindicato no es un fin en sí, sino sólo uno de los medios a emplear en la marcha hacia la revolución proletaria”.
Los trabajadores combativos necesitamos conquistar una dirección revolucionaria de nuestros sindicatos, que sirva como un punto de apoyo y referencia para organizar al conjunto de los explotados para la lucha política, agrupando a la clase obrera mundial.

Paula M.
Democracia Obrera del Estado Español

 

Desde el periódico árabe “La verdad de los Oprimidos”, “Comité por Siria” de Madrid, “Papeles para todos” de Barcelona y los Comités Antiguerra de EEUU… La lucha por hacer efectiva la solidaridad con el pueblo sirio, contra el genocidio de Bashar Al Assad, Putin y el imperialismo Refugiados sirios y luchadores solidarios con la revolución siria del Estado Español y Europa en el encuentro de la Red Sindical Internacional, llamando a luchar para frenar la masacre a las masas sirias Desde las últimas trincheras que continúan luchando en Siria, desde el periódico socialista sirio “La verdad de los oprimidos”, junto a los Comités Antiguerra de Estados Unidos, a refugiados sirios en Europa, como los de “Comité por Siria” en Madrid, y a trabajadores migrantes, como los agrupados en “Papeles para Todos” de Barcelona, presentamos seis mociones concretas al III Encuentro de la Red Sindical Internacional. En estos momentos tan difíciles para las masas sirias que continúan resistiendo en Idlib o Ghouta, quisimos hacerles llegar a todos los delegados participantes de la RSISL nuestras mociones para hacer efectiva la solidaridad con el pueblo sirio. Entendemos que el genocidio en Siria es un escarmiento del imperialismo y los gobiernos de la región para mostrarles a los trabajadores del mundo lo que les iba a suceder si osaban salir a luchar por el pan y la libertad. Fue por esto que junto a Osama Abdul Mosen, el refugiado sirio que fuera zancadilleado mientras tenía a su hijo Zaid en brazos por la fascista periodista húngara, y a Suzanne Zaura, activista hispano-siria por la revolución presentamos las mociones al Encuentro. Ellos fueron allí representando a los millones de refugiados sirios, internos y externos, que han sufrido un verdadero calvario para llegar a Europa, los que lo han logrado, cruzando mares y fronteras, con la esperanza de tener una vida mejor y se encontraron con que Europa les cerraba las puertas en sus narices y los encerraba en campos de concentración como lo ha hecho Syriza en Grecia. Fueron allí representando a los miles de trabajadores europeos que, mientras esto pasaba, le abrían las puertas de sus casas y salían a recibirlos a las fronteras. Lamentablemente los organizadores del Encuentro pusieron mil y una trabas para negarse a discutir las mociones que presentamos. Una de ellas fue la de que no eran de ningún sindicato. ¿Cómo van a tener sindicatos los refugiados que no tienen ni casa, ni trabajo? Justamente por eso planteábamos en las mociones que sean afiliados de honor de todos los sindicatos de Europa. ¿Cómo van a tener sindicatos los miles de explotados que todos los días combaten contra el genocidio de Assad, Putin, Turquía y EEUU, que se centralizan en Ginebra? Por eso nuestra moción de un llamado a todos los sindicatos y organizaciones obreras del mundo para realizar una jornada internacional de lucha para parar la masacre al pueblo sirio. Osama y su hijo Zeid, son un símbolo de la lucha de los refugiados y del trato que reciben de los gobiernos cuando pisan suelo europeo. Osama subió al escenario para denunciar la cruel situación que están viviendo todos los refugiados dentro y fuera de Siria, para denunciar la masacre de Assad, Putin y los demás imperialismos y para, junto a Suzanne, pedir la solidaridad efectiva de todos los trabajadores del mundo. Como pedían las mociones: “garantizar una caja de resistencia en favor de las masas sirias, organizando colectas de un jornal por obrero en todas las fábricas para apoyar a la resistencia y los refugiados”. Ya han pasado dos años desde que la RSISL votara: “¡Nosotros apoyaremos la revolución siria hasta su victoria final, cuando el pueblo trabajador sirio alcance el derecho a empleo, salario, educación, salud, casa, y el derecho a decidir democráticamente sobre su destino! ¡Viva la revolución Siria! ¡Vivan las revoluciones árabes!”. Las mociones que presentamos al encuentro eran para profundizar este camino, sabiendo que los trabajadores de Brasil agrupados en CSP-Conlutas hicieron flamear la bandera de la revolución siria en el último encuentro y son solidarios con los explotados sirios. Por eso es que apelamos a su reunión donde representantes de más de 70 sindicatos del mundo podían adoptar medidas de solidaridad efectiva y lucha internacionalista con la revolución siria. Lamentablemente las mociones ni se pusieron a discusión ni a votación y en el Manifiesto de la Red ni siquiera se nombra uno de los mayores genocidios a los trabajadores como lo es el sirio. Igualmente, con la solidaridad de palabra lamentablemente no alcanza, cuando ya ha quedado demostrado que condiciones para hacer concreto el apoyo a los trabajadores sirios y su lucha sobran. Justamente porque miles de obreros combativos en el congreso de CSP-Conlutas se pronunciaron otra vez en defensa de los explotados sirios y su revolución. Las fuerzas para romper el cerco existen, están allí. Si la CSP-Conlutas, como parte de la Red Sindical Internacional, fue a Palestina el 12/12 a apoyar a lucha de los trabajadores allí, nada impide que hoy organicemos una jornada de lucha internacional para parar la masacre a Siria y rompamos en cerco! ¡No podemos perder más tiempo! ¡La resistencia y los explotados sirios necesitan imperiosamente que avancemos por este camino! ¡Nada lo impide! ¡Estamos a tiempo! Organicemos un Comité Internacional de solidaridad con los explotados sirios y llamemos a todas las organizaciones obreras del mundo a ser parte del mismo.

En el III Encuentro de la Red Sindical Internacional de Solidaridad y Luchas… El NPA, que dirige el sindicato Solidaires, a los faldones de la V República francesa El III Encuentro de la Red Sindical Internacional de Solidaridad y Luchas (RSISL) ha estado comandado básicamente por dos grupos de renegados del trotskismo (SOLIDAIRES, dirigida por el NPA francés, partido donde se disolvió la antigua LCR, cabeza del Secretariado Unificado mandelista que liquidó la IV Internacional y CSP-CONLUTAS, dirigido por el PSTU brasileño, partido madre del agrupamiento morenista de la LIT-CI ) y una central del estado español, la CGT, originariamente fracción del histórico sindicato anarcosindicalista CNT pero que en la actualidad acoge mayoritariamente a sectores estalinistas descontentos con CCOO. El NPA, que dirige el sindicato Solidaires, de un principal país imperialista como es Francia, ha demostrado una vez más su carácter socialimperialista. Es que no reconoce a la burguesía imperialista de la V República francesa, como el enemigo a batir. Los asesinos de la Legión Extranjera de Francia han llevado a cabo invasiones militares a países como Malí, también han dado apoyo logístico al asesino Bashar al Assad para que continúe masacrando al pueblo sirio. En éste Encuentro internacional de su Red Sindical no presentaron ni una sola moción contra la invasión francesa de Mali. Lo máximo que se han dignado a decir es una frase vacía de contenido como la de “El colonialismo y el imperialismo oprimen todavía a numerosas poblaciones en todo el mundo; el sindicalismo tiene el compromiso de combatir estas formas de dominación”, cuando lo que hubiese sido necesario sería la más firme condena al imperialismo francés y su intervención en Mali y un llamamiento a las bases de soldados rasos a que den la vuelta al fusil y luchen contra su burguesía imperialista francesa. Nada de lo que decimos acá puede sorprender a alguien porque su política socialimperialista no es nada nueva. Recordemos que tras los auto-atentados del 13 de noviembre de 2015 en Francia, el NPA junto a otras corrientes de renegados del trotskismo salieron a decir que el enemigo número uno de las masas explotadas del mundo era el ISIS y no los carniceros imperialistas franceses que atacan y bombardean Siria, que invadieron Malí y masacraron a más de 3000 explotados en ese país.  Por eso en éste último encuentro de la Red Sindical que se realizó en Madrid, inclusive ante la presencia de delegaciones sindicales de Mali, Costa de Marfil, Botswana y frente a los refugiados sirios que fuimos a plantear las mociones por Siria, el NPA que dirige Solidaires se calló la boca sobre las tropelías y masacres que su gobierno imperialista comete contra los explotados en todo el mundo. Son enemigos de decirle a la clase obrera en Europa y EE.UU, que ¡EL ENEMIGO ESTA EN CASA! que el imperialismo es la barbarie, los más grandes carniceros de las masas explotadas, son el 1% de parásitos -como lo denunciaban la juventud y trabajadores de EEUU- que se lo derrota enfrentándolo con la lucha en las calles, con la huelga general. Así, esta izquierda lacaya ayer de Hollande y hoy de Macron, afirman junto a los carniceros imperialistas: ¡El enemigo es el ISIS!. ¡Esta "nueva izquierda" son todos, amigos del "frente democrático"! Son los continuadores de la lacra stalinista y su teoría de los campos burgueses, según la cual, habrían dos "bloques burgueses", uno "progresivo" y otro "regresivo", y afirman que la clase obrera puede utilizar para sus fines uno de ellos: el "progresivo" (en este caso la Francia "democrática"), estableciendo acuerdos políticos con ellos. Como ayer Stalin pactaba con el imperialismo "democrático" -con Churchill, Roosevelt- en Yalta y Postdam para derrotar la revolución mundial... estos reformistas siguen sus mismos pasos y se han ubicado en la trinchera de la "democrática" V República Francesa... Llamamos a los trabajadores de base de Solidaires a enfrentar esta política de la dirección del NPA que quiere poner a su sindicato a los pies del imperialismo “democrático” francés. La clase obrera francesa debe levantarse contra su propia burguesía imperialista ¡EL ENEMIGO ESTA EN CASA! ¡Muera la V República francesa! ¡Fuera las tropas francesas de Mali y todo África!